Aunque está abierto al diálogo, pide a los Estados Miembros que no le aten las manos, sino que le den un presupuesto que permita al personal cumplir su tarea.
La Comisión ha oído testimonios creíbles según los cuales los agresores ataron un nudo al cuello a las personas capturadas y las arrastraron por el suelo con caballos y camellos.
Después de haberme comprado me trajo usted a este sitio para matarme; pero, sintiéndose compasivo, prefirió atarme una piedra al cuello y tirarme al mar.