Pero a pleno día, con el estomago lleno y el corazón contento, el relato de Miguel no podía parecer sino una broma como tantas otras suyas para entretener a sus invitados.
A su cuerpo le puede tomar hasta un mes digerir una sola hoja, hasta para digerir son muy lentos y eso que su estomago tiene cuatro partes como el de una vaca.
Y esta es como la entestala a la fiesta que nos aguarda allá más adelante y son puros puestos de comida, mucha comida, más comida que bebida y aquí te llenas el estomago para poder fiestear sin fin después.