Algunos testigos hicieron hincapié en la manera en que se realizaban los arrestos, por lo general entre las 2 y las 3 de la mañana, cuando la gente estaba durmiendo.
6 Un sueño espeso de olvido y la perspectiva de que aquella tarde volvería a ver a Clara me persuadieron de que la visión no había sido más que una casualidad.