Por ello encomiamos en particular los esfuerzos que han hecho los afganos para finalizar la estrategia nacional de desarrollo como prueba de su participación nacional activa.
También se presionó a los afganos para que salieran de los países de acogida, lo que algunas veces puso en entredicho el carácter voluntario de la repatriación.
La decisión se basó también en la consideración de que los ciudadanos afganos corrientes desconfiarían de sistemas basados en listas de partidos más bien que en candidatos individuales.
No obstante, reiteramos nuestra firme convicción de que la responsabilidad primordial de velar por la seguridad recae en los afganos, lo que refleja el control nacional de los afganos.
La mayor parte de los afganos, especialmente los de las zonas rurales, confían en los mecanismos de justicia tradicionales, aunque el derecho consuetudinario no forma parte del sistema jurídico oficial.
En el Afganistán, por ejemplo, el ACNUR prestó asistencia a casi medio millón de afganos para que regresaran a sus hogares, lo que constituyó la mayor repatriación voluntaria del mundo.
La estructura específica de la presencia futura de las Naciones Unidas no se ha determinado aún pero debe incluir a los propios afganos y tomar en cuenta las necesidades reales del país.
Durante esos días, los afganos que no estaban inscritos en el censo electoral tuvieron la oportunidad de inscribirse y los que sí lo estaban pudieron actualizar la información que figuraba en sus tarjetas de registro.